El inicio de la independencia de México
Por Verónica Toro
A inicios del siglo XIX, los habitantes de la Nueva España estaban muy inconformes con el reinado. Para combatirlo, algunos personajes de suma importancia comenzaron a unirse, entre ellos el cura Miguel Hidalgo y Costilla (líder), Ignacio Allende, Juan e Ignacio Aldama, Mariano Abasolo, Mariano Jiménez, Miguel Domínguez (corregidor) y su esposa Josefa Ortiz de Domínguez. A este grupo se le conoció como la “Conspiración de Querétaro”, por ser ésta la ciudad donde se realizaban dichas reuniones.
El Capitán Joaquín Arias, encargado de dirigir la sublevación, traicionó a los independentistas al informar a las autoridades sobre sus planes; Josefa Ortiz de Domínguez se entera e informa a sus colegas de inmediato, por lo que Miguel Hidalgo decide tomar acciones antes de lo previsto.
Las primeras luchas
Todo comenzó con el famoso “Grito de Dolores”, realizado por Miguel Hidalgo. El 16 de Septiembre de 1810, hizo un llamado a todo el pueblo en la ciudad de Dolores, a través de unas campanadas en la parroquia principal. Sosteniendo un estandarte de la Virgen de Guadalupe y pronunciado las siguientes palabras: “¡Viva la Virgen de Guadalupe, que mueran los gachupines, Viva México!”, surge el detonante para la lucha a favor de la independencia del país.
Ignacio Allende logra unirse a las tropas en San Miguel El Grande; el ejército insurgente se preparó para tomar la ciudad de Guanajuato. El 28 de septiembre, Hidalgo ordena incendiar la puerta de la Alhóndiga de Granaditas, un edificio que sirvió como cuartel de bienes para los españoles; entre los ofrecidos para realizar la hazaña, se encontraba Juan José Martínez, mejor conocido como el “Pípila”, quien falleció en el acto. Actualmente, ahí mismo existe una estatua en honor al personaje.
Principales batallas
El primer enfrentamiento fue conocido como la “Batalla del Monte de las Cruces” en la ciudad de Toluca. Las tropas de Miguel Hidalgo triunfaron y desalojaron el área antes de que el español Félix María Calleja los atacara. Se resguardaron en Querétaro, en donde Calleja los derrotó, reduciendo sus hombres a la mitad a lo que se le conoció como la “Batalla de Aculco”. Allende e Hidalgo se reúnen días después en Guadalajara y juntos enfrentan a las tropas de Calleja, quien resulta nuevamente victorioso. A esta lucha se le conoce como la “Batalla del Puente de Calderón”.
En seguida, Hidalgo se dirigió a Zacatecas y al norte del país pero fue aprehendido en el trayecto. Un ejército de aproximadamente 2,500 hombres, con Ignacio López Rayón a la cabeza, fueron aprisionados en Norias de Bajan, Coahuila. Hidalgo, Allende, Aldama y Abasolo fueron enviados a Chihuahua y condenados a muerte. El 31 de julio de 1811, Miguel Hidalgo fue ejecutado, pero la labor continuó y nuevos líderes surgieron.
Continúa…