Los árboles de Navidad forman parte de la decoración decembrina en muchos hogares alrededor del mundo, como un símbolo de esperanza en medio del frío invierno.
Como es de esperarse, los adornos que engalanan estos arbolitos varían tanto como tradiciones en el mundo hay, y en México aportamos nuestro estilo único con detalles elaborados con hoja de maíz, estambre, palma o latón, así como esferas de vidrio soplado, cerámica y talavera.
Aunque el origen de las esferas se remonta a mediados del siglo XIX en Francia, cuando la escasez de manzanas en fechas decembrinas —que eran el adorno típico de los árboles de Navidad— hizo que el ingenio de los artesanos creara esferas de vidrio soplado para decorar los arbolitos, en México no tardamos en adoptar estos adornos haciendo uso de las técnicas de cerámica y vidrio que ya se dominaban en el país.
Así, en diferentes estados como Michoacán, Puebla y Jalisco, los artesanos comenzaron a crear auténticas obras de arte que siguen replicándose al día de hoy. Este es el caso de Macario Covarrubias, artesano de Tonalá, Jalisco, quien desde los 9 años de edad ha dejado el corazón en cada artesanía que crea, y cuyas esferas son orgullosamente las piezas principales de los árboles de Navidad de Grand Velas Riviera Maya, en los ambientes Zen Grand y Ambassador.
Las esferas que Macario concibió para nuestros árboles son piezas originales en forma de corazón y esferas con diseños y patrones únicos. Su elaboración tomó cerca de 22 días entre el vaciado del barro en moldes, secado, horneado, trazado, aplicación de pintura, esmaltado y segundo horneado para dar un acabado vidriado.
Estas bellas piezas, 180 en total, fueron elaboradas bajo encargo de Velas Resorts, pues siempre es un honor para nosotros desplegar las diferentes expresiones de arte y rendir un homenaje a nuestro legado cultural.
Cuéntanos, ¿cómo adornas tu árbol de Navidad en casa? ¿Incluyes piezas artesanales en su decoración?
Aprovechamos para desearte ¡feliz Navidad y Año Nuevo!
Acerca de Macario Covarrubias
Aprendiz de los maestros Jorge Wilmot Mason y Fernando Carmona. En su trabajo mezcla con destreza la escultura y la pintura representando obras con elementos y formas orgánicas. Su decorado a base de esmaltes de colores texturizados, y su experimentación con lustres de oro y plata, proporcionan a su obra un toque vanguardista. Se ha desempeñado en la administración pública, destacando el periodo 2010-2012 como Director del Museo Nacional de la Cerámica de Tonalá. Como promotor ha gestionado galerías en la localidad.