Despertar temprano para aprovechar el mayor tiempo en este grandioso lugar es la mejor idea que puedes tener. A ritmo de Mar-León Larregui, comienza nuestro viaje.

¡Haz la parada al camión! Los autobuses que van hacia Sayulita son los Compostela-Pacífico (color verde con blanco). Cobra alrededor de $30 a $35 pesos, dependiendo de donde lo tomes. Tiene varias paradas: Las Glorias, Galerías y el aeropuerto. Normalmente pasan cada media hora.

Se hacen alrededor de 45 minutos hacia este hermoso destino. Prepárate una buena playlist para que disfrutes el recorrido; si vas en auto te recomiendo que tomes el camino que pasa por la Cruz de Huanacaxtle, es más cómodo y tiene una magnífica vista.

El camión te deja en la entrada del pueblo y debes caminar un poco para llegar a lo bueno. Prepara el estómago para las delicias que probarás aquí.

Desayuno

Al llegar a la plaza, encontrarás distintos puestos de comida donde disfrutarás desayunos con un sazón que no hallarás en otros lugares; desde chilaquiles hasta huevos al gusto. También encontrarás un café y chocolate delicioso. Muchas personas llegan a los tacos que están en la entrada, pero yo los dejaría para la comida.  

De ahí puedes dar un recorrido a pie por las calles y encontrar tiendas en las que te querrás llevar todo; desde artesanías hasta ropa.

Una vez que el desayuno se haya bajado con la caminata, ¡vámonos a la playa! Al llegar, la encontrarás llena de surfistas, expertos y principiantes. Si te decides por practicar algún deporte de tabla, ahí te pueden rentar una y enseñarte las cosas básicas, si no sabes. O si tu plan es ir a relajarte un rato, algunos restaurantes tienen camastros y los ponen a tu disposición con el consumo de alguna botana, bebidas, etc.

Comida  

Ya que pasaste un rato, nadaste o intentaste surfear, llega el hambre. Si te quedaste en un camastro y no quieres moverte, ahí mismo puedes consumir alimentos; pero si quieres probar una delicia te recomiendo ir a los tacos que están bajando el puente de la entrada. Hay de distintos tipos: marlín, camarón o pescado, con tortilla dorada o normal, así como capeados; también venden tostadas de ceviche y aguachile.

Al terminar los alimentos, normalmente no te quedan ganas de hacer nada, así que puedes descansar un rato en la plaza.

Cuando ya sientas ganas de ir de nuevo a la playa, te recomiendo ir a Los Muertos… ¡No!, en Vallarta no; es una playa que se encuentra detrás de una formación rocosa y está pasando el panteón de Sayulita. Las personas la consideran una alberca natural debido a que sus aguas son muy mansas.

Es un escenario muy irreal, ya que el panteón está abierto y no cuenta con separación. Antes de caminar hacia esta playa, te recomiendo compres botanas y bebidas, ya que en esta zona no hay gran variedad, sólo algunos puestos pequeños. Para llegar ahí tienes que pasar Villa Amor; si no la encuentras, pregúntale a cualquier local, ¡todos son personas muy agradables!

Pasa un buen rato y relájate. Si quieres música, llévate unas bocinas y otra buena playlist para playa. Como a las 7:00-8:00 p.m. muévete hacia la plaza.

Cena

Mi recomendación de siempre: Monchis, las hamburguesas. Además del buen sabor, disfrutarás de música en vivo y un ambiente inigualable. Arriba de este restaurante está Don Pato, bar donde la pasarás increíble. De igual manera, hay otros establecimientos donde podrás cenar, beber algunos tragos y pasarla bien.

El último camión de Sayulita a Puerto Vallarta sale a las 9:45 p.m. Si quieres seguir en la fiesta, hay hoteles y hostales muy accesibles. Y así es como termina un buen día en Sayulita.

Prepara tus cosas y ven a visitar este hermoso pueblo mágico. Así como este, hay muchos sitios por visitar en la zona; no sé a dónde me lleve el próximo camión que tome.